¿Qué entendemos por el término espíritu emprendedor? Hablamos de un concepto multidimensional que incluye valores personales, tales como la creatividad, la disposición positiva para la innovación y el cambio, la confianza en uno mismo, la motivación de logro, el liderazgo, la aceptación del fracaso como fuente de experiencia, y las actitudes de cooperación y de trabajo en equipo. […]
Así lo explica Carmen Pellicer en un artículo sobre cultura emprendedora en el sistema educativo. Y es precisamente en esos aspectos que resalta, en los que sustenta el programa de formación que nuestro equipo ha iniciado hoy, y que se desarrollará hasta el 23 de diciembre.
Alrededor de 40 profesionales del personal técnico de Andalucía Emprende –de la Junta de Andalucía– asistirán a los cuatro módulos de formación en los que se ha desglosado el programa de manera online. Cuatro módulos que están divididos en dos unidades cada uno. De este modo, y a través de conexiones síncronas, las sesiones se desarrollan mediante una metodología interactiva en formato online, a través de la plataforma formativa de Andalucía emprende. Tras cada sesión, se podrá asesorar y resolver dudas en un foro de trabajo durante las dos horas posteriores a la formación.
Los módulos se centran en: desarrollar la creatividad y la capacidad de innovar y aprender; estudiar las estrategias de pensamiento y el Design Thinking; profundizar en el aprendizaje cooperativo y las Flipped Classroom, para potenciar el trabajo en equipo; el trabajo por proyectos y el diseño de tareas; y la evaluación.
Con todo esto, la finalidad que persigue este programa es potenciar el desarrollo de la inteligencia de los alumnos, su capacidad de realización personal, el autoconocimiento y la autoconfianza; así como promover y fomentar los procesos creativos en la innovación y el emprendimiento, al tiempo que se desarrollan habilidades sociales y comunicativas.
La primera formación ha corrido a cargo de Inmaculada Castaño, coordinadora de emprendimiento de la Fundación Trilema.